A veces, solo por disfrutar el placer de regodearse en el dolor sabiéndolo lejano, imaginaba cómo sería su vida sin él. Cómo habría vivido todo aquello, en qué extraño y oscuro pozo sin fondo se habría convertido su existencia.
A veces le gustaba imaginar cómo sería su cama vacía, sus tardes solitarias, sus días sin más, uno tras otro.
A veces le gustaba imaginarlo para volver a considerarse una persona afortunada.
Para no olvidar que no debía olvidarlo.
La derivada racista de la DANA
Há uma semana
4 comentários:
No olvidarnos de no olvidarlo, de recordarlo; ser conscientes. Es muy importante.
A la vez, y aunque parezca contradictorio, creo que también es importante darle a todo cierto tono de normalidad e inconsciencia, para no sentirnos demasiado abrumados por la vida.
O dependerá del día.
Besos.
Depende del día, sin duda.
Pero a veces, para los que tienen cierta tendencia al desánimo, resulta muy provechoso echar un vistazo y ver lo que hay.
Y cuando a una le sale la vena "pobrecita de mí", este método va muy bien.
Pero es que además es cierto. Mi vida es lo que es gracias a él.
En parte.
Gracias a él, en parte.
Otra parte es gracias a otros. Y otra, muy importante, gracias a ti.
Aunque la suya sea la principal y la que más quieres, claro.
Todos practicamos eso a veces. Darnos cuenta de lo bien que estamos cuando no está el mal. Es útil y productivo.
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