quinta-feira, 6 de outubro de 2011

Salud, dinero y amor

¿En qué orden?

Para mí: "Amor, salud y dinero".

Y cuánto más tiempo pasa, más convencida estoy.

17 comentários:

Anônimo disse...

Lo del dinero en última posición lo tengo claro, con los otros dos dudo. Sí tengo que elegir, elijo el mismo orden que tú, pero con algunas dudas.

María

A filla do mar disse...

Sí, la posición del dinero está clara. pero para mí la otra también. Y cada vez más.

Prefiero llegar a vieja enferma y acompañada que sana y sola.

Un beso.

Anônimo disse...

Y cómo va la cosa? Se cumplen las previsiones? ;)
Bicos.
LLS.

Anônimo disse...

Puf, no sé, es que si pienso en enfermedad pienso en dolor y el dolor es muy puñetero, te impide apreciar la compañía, el amor, todo.

Por otro lado, tener una salud de hierro y estar solo tampoco parece una buena alternativa ...

María

Portarosa disse...

(¡Ya estamos con el dolor...! No entiendo cómo puede ser el dolor, lo que a algunas personas más os preocupe de la enfermedad.)

Dices, Filla, que prefieres llegar a vieja enferma y acompañada que sana y sola. Coño, es que no arriesgas mucho, ¿no?: ¿y no llegar a vieja?, ¿y perder a todos tus seres queridos, y su amor, mucho antes de lo normal?

Yo pongo de primero el amor, también. Con dudas, pero lo pongo. Porque, precisamente, veo que lo que me hace valorar la salud es la posibilidad de perder a las personas que quiero.

Pero, ¿y qué pasa cuando nos referimos a los demás? ¿Qué le desearíais en primer lugar a un hijo? ¿Que tenga salud o amor?

Besos.

Portarosa disse...

Pero muchas dudas.

¿Para qué quiero el amor si me muero?
¿Y la vida sin amor, la querría?

A filla do mar disse...

Es que no estamos hablando de morirse o de vivir. Estamos hablando de vivir con mala salud o de vivir sin amor. Pero vivir en cualquier caso.

Y yo, repito, prefiero el amor a la salud. Y creo que lo quiero para mí y también para las personas que quiero pues si les deseo salud, les quito el amor y, qué hago con el que les tengo?

La pregunta es:
¿Para qué quiero el amor si estoy muy enfermo?
¿Para qué quiero una salud de hierro si estoy solo?

Portarosa disse...

¡Hombre, es que así es muy fácil!
¿Cómo que no hablamos de morir? ¡No hablará usted!

Cuando deseamos salud, para nosotros o los demás, por supuesto que consideramos la posibilidades que la mala salud sea tan grave como para morir.

Si no, ¿de qué hablamos? ¿Enfermedades en general? ¿Solo las graves? ¿Del dolor?
Para mí, la salud es ante todo no morirme :-)

A filla do mar disse...

Oh!
Pues claro que no hablamos de eso, hombre!

Hablamos de en qué condiciones preferimos vivir.

Mire usted:
"Tres cosas hay en la VIDA: salud, diner y amor (...)"

Y cuando se habla de escoger se habla de extremos, claro, porque si no yo lo que prefiero es tenerlo todo.

Portarosa disse...

De eso nada. No se excluyen las enfermedades mortales, cuando se desea salud.

A filla do mar disse...

Señor! Qué cruz!

Pues entonces, el planteamiento es el siguiente:

Prefieres estar enfermo de una enfermedad mortal, pero acompañado o estar sano y durar hasta los 100 años solo?

(Que es, básicamente, de lo que estábamos hablando: de vivir enfermos y acompañados o sanos y solos.)

Portarosa disse...

Depende. ¿Cuánto me queda de vida?

(Es que no, no hablamos de eso. Bueno, a lo mejor en este post sí, pero no en general. No se deja fuera a la muerte, en este dilema.)

A filla do mar disse...

Pues yo creo que sí.

El dilema está en cómo quieres vivir la vida. En esa vida que es primordial para ti:
- tener riquezas y comodidades.
- tener compañía y personas a quién querer y que te quieran
- tener salud y no sufrir dolor ni enfermedades importantes.

Y esto cogido todo en extremo, claro.

Cuando hablamos de dinero, hablamos de ser rico frente a ser pobre, a pasar necesidades.

Cuando hablamos de amor, hablamos de estar rodeado de gente que te quiere (pareja, hijos, familia, amigos) o de estar solo en el mundo, sin compañía.

Y cuando hablamos de enfermedad, hablamos estar sano, que la salud no sea una preocupación o de sufrir enfermedades serias, importantes y que te limiten.

La muerte, por desgracia, está implícita en todas las posibilidades (sufrir tantas estrecheces económicas como para morir de hambre, sufrir tanta soledad como para desear morir,o sufrir una enfermedad mortal).

Portarosa disse...

I don't agree.

Dejar la muerte fuera de la ecuación de la salud es desvirtuar la comparación, en mi opinión.

A las pruebas me remito: yo. Quiero decir, que para mí desear salud es ante todo alejar la muerte; no para siempre obviamente, pero sí por el momento.

Anônimo disse...

Perdón por la intromisión!

Creo que mientras hay salud, tenemos la posibilidad de buscar y encontrar en la vida todo lo demás (amor, felicidad, dinero), etc. En cambio, si no hay salud, ya sea nuestra o de nuestros allegados, se convierte en nuestro principal objetivo y lucha.

Y por lo que he vivido muy de cerca y recientemente, creo que puedo afirmar qué el amor pasa a un segundo plano, cuando la salud empieza a decaer....
El amor por un ser querido desaparecido, provoca mucho dolor y no precisamente por enfermedad, o tal vez sí?

Al menos, en este momento lo veo así.

Anônimo disse...

¿Y qué me dicen de las personas enfermas que encuentran el amor?

giovanni disse...

Buen orden, o buena orden. Estoy de acuerdo 100 por ciento. Otro saludo desde Amsterdam