sexta-feira, 24 de fevereiro de 2012

Me voy a África


Toca cenar judías. El conflicto ya lo veo venir, pero, aún así, me armo de paciencia y no me rindo.

-         No me gustan.
-         No lo sabes si no las pruebas.
-         Es que ya sé que no me gustan.
-         Las comiste un montón de veces y te gustaron.

Y así, un rato. Cuando la cosa ya no da para más, me pongo seria, muy seria. Y él, viendo que ya no le quedan argumentos ni armas para defenderse o atacar, me espeta:

-         Es que ya estoy cansado, mamá. ¡¡Me voy a África!!

Tuve que contener la risa mientras le decía que él no se iba a ningún lado, ni a África ni a la vuelta de la esquina, sin mi permiso y el de su padre. Que para ir a África tendría que ir con nosotros o ser muy mayor para poder ir solo.

En el fondo creo que es lo que esperaba oir.

Um comentário:

Anônimo disse...

Seguro que sí.

http://madredemarte.wordpress.com/