En unas semanas, cinco para ser exacta, cumpliré 37 años. Casi ni me he dado cuenta de los 36, ni de los 35. En realidad casi no me he dado cuenta de que han transcurrido los años desde que fui a buscar a Cibrán. Tal vez sea porque han pasado tantas cosas y tan rápido que no me ha dado tiempo a sentirlo.
El caso es que hoy me he parado a pensar en mi edad y, por primera vez, he caído en la cuenta de que ya se va haciendo tarde para tener un hijo biológico.
Nunca había pensado en esa posibilidad, supongo que debido a la tranquilidad que me aportaba saber que siempre podría llamar a esa puerta. Pero ahora, de repente, ese siempre tiene un límite. Y está ahí, cerca.
Me gusta cumplir años y nunca he deseado ser más joven o volver atrás pero creo que tengo, por primera vez, la sensación de que el tiempo se acaba.
La derivada racista de la DANA
Há uma semana
4 comentários:
...mmm...yo nunca lo he visto así, la verdad.
No tengo sensación de que se acabe el tiempo. Lo que más agobio me da es no darme cuenta de que hoy es el día que tengo que vivir.
Y bueno..a mí me encanta cumplir años. Espero que tus 37 sean mejores que los míos.
Y para tener otro hijo..estás a tiempo...
Tampoco yo la tenía, hasta hoy.
Para los millones de cosas que deseo hacer, y todavía no he hecho, siempre he pensado que tenía todo el tiempo del mundo. Nunca he sentido que el paso de los años les estuviese poniendo límite.
En cambio hoy me he dado cuenta del peso de la biología, de que ahí los años mandan y son los que dicen: Hasta aquí, maja. Se te acabó!
La verdad es que no quiero tener otro hijo. Bueno, sí quiero, sí me gustaría que Cibrán tuviese un hermano (me gustaría más por él que por mí) pero no puedo ni económica ni "logísticamente". Y seguramente lo haré (o no) pero por la vía de la adopción.
El caso es que hoy me he dado cuenta realmente de la edad que tengo.
(Ya iba siendo hora, por cierto...)
A mí la ginecóloga, cuando la miré por lo visto con cara de tristeza, me dijo hasta los cuarenta cuarenta y pocos aún tienes tiempo, mujer, no te agobies. En fin, los médicos son los que entienden de biología, pero yo no me la acabé de creer del todo. Hmmm. También me di cuenta en ese instante del paso del tiempo, biológicamente hablando, porque honestamente ser madre a los cuarenta y tantos no me parece del todo "natural", ¿no?
No dejes a Cibrán solo, niña. Es una pequeña putadita, aunque no te lo parezca. La decisión, sobre todo, es tuya, pero yo que soy hija única y además hija de padres jóvenes (42 y 50 años tenían los mozos cuando yo llegué), echo de menos tener hermanos ni te imaginas. De hecho yo ya represento la generación actual en mi familia porque ni padre, ni madre, ni perro que me ladre.
Un beso, bonita. No sé si al final te he acabado agobiando más... Espero que no. :-)
A mí me ha sucedido lo mismo en estos días... aunque te gano por 2 años, ya tengo 39.
No quiero más hijos de los 2 que tengo, y si los quisiera, serían adoptados, pero saber que probablemente ya no podré tener hijos biológicos, si es que los quisiera... me ha tocado.
http://madredemarte.wordpress.com/
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